Enológico
Más del 60% de las bodegas del país están ubicadas en nuestro territorio, destacando el Tannat como la especialidad con la que invitamos a nuestros visitantes, junto a la variedad de carnes que se encuentra en típicas parrillas nacionales.
Las bodegas turísticas de Canelones se caracterizan por su tradición familiar y la herencia de conocimientos traídos desde el viejo mundo por los inmigrantes, transmitidos de generación en generación. Esto le da una impronta diferente a las propuestas, ya que el visitante es recibido y atendido por sus propios dueños, existiendo un involucramiento en sus tradiciones y costumbres.
Las actividades apuntan a despertar los sentidos a través de visitas guiadas que permiten conocer el proceso de elaboración y crianza del vino, catas y degustaciones, paseos por los viñedos, participación en la cosecha y poda de la vid.
Estas experiencias hacen posible observar al vino con otros ojos, conocer de cerca las historias que encierran, el escenario donde éste comienza a producirse y las personas involucradas durante el proceso.
Recientemente, el vino fue declarado bebida nacional, mostrando el interés de Uruguay en reafirmar la vitivinicultura como “marca país”.
El turismo enológico es una de las diversas actividades que se disfrutan junto con los paisajes y la calidez de la gente en Canelones.